67 SEMINCI – La voz y el martillo de Ismael Aveleira, Víctor M. Díez, Rodrigo Martínez

67 SEMINCI – Sección Castilla y León en largo – La voz y el martillo de Ismael Aveleira, Víctor M. Díez, Rodrigo Martínez

Ficha

Título original: La voz y el martillo. La película.

Año: 2022.

Duración: 63 min.

País: España.

Dirección: Ismael Aveleira, Víctor M. Díez, Rodrigo Martínez.

Idioma original: castellano.

Guion: Rodrigo Martínez (sobre la obra homónima).

Música: caja baja.

Locución: Guadalupe Díez

Fotografía: Ismael Aveleira.

Productora: caja baja. Fundación Jesús Pereda de CC.OO. de Castilla y León.

Género: documental, audiovisual, antropoética, docuarte, performance.

Sinopsis.

Película documental realizada por Ismael Aveleira, con dirección y guion de sus intérpretes: Víctor M. Díez y Rodrigo Martínez, integrantes del dúo caja baja. Se trata de una versión cinematográfica de una pieza escénica homónima que reflexiona sobre el mundo del trabajo y de la cultura desde una perspectiva ético-estética, con sus valores, memoria e historia. Un conjunto de textos (poemas, prosa, citas), músicas y testimonios bajo una mirada que los autores denominan antropoética y musical.

Crítica.

El fin de la pandemia (al menos en su fase más grave) de 2020 y 2021, la propia experiencia inédita para todos de vivir un confinamiento, el regreso al trabajo tras ese confinamiento, bien al centro físico o con su continuidad en la modalidad de teletrabajo, propiciaban reflexionar sobre el mundo laboral pospandémico desde el mundo de la cultura, pero sin perder de vista que esa reflexión debía abarcar el mundo del trabajo en su conjunto, incluido el del pasado. Solemos pensar que el pasado está detrás de nosotros, a muestras espaldas, pero el pasado está delante de nosotros, ante nuestros ojos, como el futuro. Siempre ha sido así y lo será.

Esta es la propuesta que encara caja baja, el dúo formado por Víctor M. Díez, poeta,  performancer y director escénico, y Rodrigo Martínez, músico, folclorista experimental, y etnógrafo que recoge músicas y testimonios personales de las tierras de León. Un acercamiento ético-estético, como lo denominan los autores, desde la música, la poesía, la prosa y los testimonios en forma de voz e imágenes de los protagonistas del mundo del trabajo: los obreros, y también las mujeres, ellas mismas obreras en muchas ocasiones en el campo o en la mina.

El documental ha sido grabado en tres espacios: la antigua Ferrería de Sabero, hoy Museo de la Siderurgia y la Minería, en el Teatro El Albéitar de León y en el paisaje llano y ondulado de Matadeón de los Oteros. Tres espacios que reúnen el mundo industrial y minero, el trabajo del campo, y un edificio relacionado con el mundo de la cultura.

El docuarte (como lo denominan los autores) está estructurado en varios cuadros o secciones: en la apertura contemplamos cómo un escribidor desgrana un torrente de reflexiones en su vieja máquina de escribir, y cómo se proyecta hacia el futuro, rayando en la distopía, con un mundo donde las maquinas lo harán todo y donde cabe preguntarse qué papel tendrán las personas. Un mundo, además de autoexplotación, donde la propia persona ha asimilado la competitivad contra sí mismo, siguiendo las reflexiones de Byung-Chul Han.

Es desde el mundo de la cultura desde el que se inicia, por tanto, la reflexión propuesta por el documental: desde una oficina donde ese escribiente cataloga las diversas visiones del trabajo, tanto como cumplimiento del deber, como honra, como condena bíblica, o como lugar de alienación. Es también el momento de analizar la situación de la precariedad en el mundo laboral, tras la progresiva extinción del modo de producción fordiano e industrial, o sobre  el impacto del teletrabajo en las condiciones laborales al haber convertido el espacio de la casa en lugar productivo, borrando las frontera entre el ocio y trabajo, o la situación de los autónomos en el mundo de la cultura, acusados por algunos (en el colmo de la cosa) de no trabajar o de vivir de subvenciones.

En los siguientes apartados, el docuarte transita hacia la poesía y la música que acompaña  Blues castellano de Antonio Gamoneda. O deriva hacia una de las canciones, siempre provocadoras, de Chico Sánchez Ferlosio, como es Hoy no me levanto yo. Una transición de cuadros que nos llevará a los testimonios de hombres y mujeres que vivieron los años más duros de la minería, y cuyas voces escuchamos con un fondo de imágenes de las comarcas mineras, o al paisaje de la comarca de los Oteros y a los caminos de la vida campesina.

Para volver a la música y al tipo de música que realiza caja baja, donde el uso de instrumentostradicionales se combina con esos sonidos y ruidos menores (a los que hace referencia el nombre de caja baja), casi munúsculos, de cucharillas, canicas y cantos de pájaros…, sin renunciar al tratamiento electrónico, y donde la palabra por medio de la canción tradicional o del poema adaptado nos cuenta y a la vez nos interroga.

Un texto de Isaac Rosa, Van un repartidor, una teleoperadora y un autónomo de la cultura,  hace de síntesis de esta reflexión ética y estética, entre la poesía, la música y la performance, y que resume la vida y vicisitudes de tres actividades laborales y una misma condición laboral asociada a la precariedad y a la dificultad de alcanzar la autonomía personal a través de un trabajo decente, estable y respetado socialmente. Una propuesta audaz, de una sobria belleza formal, y una extraordinaria fusión de músicas tradicionales y de textos, tanto de poetas o de filósofos, como de gente común, de trabajadores contando su experiencia del propio trabajo. El documental se proyectó dentro de la sección de la SEMINCI Castilla y León en Largo (junto a otras cuatro películas), que quiere mostrar las producciones castellanas y leonesas realizadas en nuestra tierra. Producciones que, ciertamente, no son muchas y necesitan el apoyo del público y de las organizaciones de la sociedad civil. Como en este caso por parte de un sindicato, CC.OO, a través de la Fundación Jesús Pereda, dedicada a aunar y buscar complicidades entre el mundo del trabajo y el mundo de la cultura.

Presentación de La voz y el martillo en la 67 SEMINCI

Gonzalo Franco Blanco

Revista Atticus