66 SEMINCI – Crítica película Hive (La colmena) de Blerta Basholli

Crítica película Hive (La colmena) de Blerta Basholli por Carlos Ibañez

Ficha

Título original: Hive

Año: 2021

Duración: 84 min.

País: Kosovo

Dirección: Blerta Basholli

Guion: Blerta Basholli

Música: Julien Painot

Fotografía: Alex Bloom

Reparto: Yllka Gashi, Cun Lajci, Aurita Agushi, Kumrije Hoxha, Adriana Matoshi, Molikë Maxhuni, Blerta Ismaili, Kaona Sylejmani, Mal Noah SafQiu, Xhejlane Terbunja, Ilir Prapashtica, Bislim Muçaj, Blin Sylejmani, ver 14 más

Productora: Coproducción Kosovo-Suiza-Albania-Macedonia; AlbaSky Film, Alva Film, Black Cat Production, Ikone Studio, Industria Film

Género: Drama | Pobreza. Feminismo. Drama social

Sinopsis

    En un pueblo muy unido de Kosovo, las familias luchan para llegar a final de mes, ansiosas por recibir noticias de los maridos, padres e hijos que fueron a la guerra. Cuando las abejas de Fahrije dejan de producir miel, decide sacarse el carnet de conducir y se aventura a la ciudad para vender ajvar casero en una tienda de comestibles local. Su ingenuidad y ambición ponen a prueba a los habitantes de un pueblo conservador por naturaleza en el que siguen vigentes las nociones patriarcales y tradicionales de la sociedad. Para poder sobrevivir tiene que superar los insultos y los ataques físicos que tratan de impedir por todos los medios que la mujer pueda valerse por sí misma.

Comentario

            Terrible telefilme elevado a la categoría de cine por su temática sobre mujeres (agota ya esto SEMINCI) que sufren, como si el resto de la humanidad lo pasase bien por el mero hecho de no serlo. Aquí se habla de una matanza realizada por los chetniks serbios en Kosovo durante aquella vergüenza que fue dejar independizarse a esa parte de la antigua Yugoslavia. Pero hablemos de cine, porque el hecho de las mujeres que sufren mucho en una sociedad machista y musulmana ya está más que manido desde nuestras cabezas occidentales, pero en los Balcanes, en plena Europa, eso no está tan bien visto. Y de eso tira la directora de esta propuesta de poco cine.

            Una mujer, sus hijos, su suegro en silla de ruedas y un marido desaparecido durante la matanza de Kusha. Que se alía con otras mujeres para sacar hacia delante a su familia junto a una mujer mayor a la que el qué dirán le da exactamente igual. ¿Y qué hacen? Una salsa típica albanesa a base de pimientos rojos, berenjena, ajo y aceite.

            En el camino hasta establecerse, y una vez establecidas, vemos el machismo rural kosovar, la miseria moral y agresiones de todo tipo que sufren con un solo apoyo masculino, el del gerente del supermercado de Prístina y el de una mujer urbanita, que es quien le ofrece, junto al resto de las mujeres de desaparecidos, la posibilidad de sacarse el carné de conducir para poder trabajar, dato que no da ni la película ni ningún nacionalista: tras las independencias suele perderse entre el cuarenta y el sesenta por ciento del empleo y la renta per cápita cae en picado, sólo hay que leer Eurostat.

            Pero regresemos a esta historia de éxito, porque lo que narra es puramente capitalista, ya que Fahrije, la protagonista y en quien está basado este hecho real inspirador de, repito, esto que no es más que un telefilme de esos para quedarse dormido después de comer un domingo, es una empresaria de éxito en la actualidad y tiene más de cien empleadas.

           

Los muertos, desaparecidos, tirados a una cuneta poco importan a las autoridades, que asientan su escaño sobre estos cadáveres y muchas mentiras, y a la directora y guionista sólo de refilón, porque hacerse la víctima es mucho mejor que serlo… Y de eso sabemos mucho en este país, por desgracia.

            Horripilante desde el punto de vista artístico y para hacérselo mirar desde el punto de vista ético.

            Se salva el suegro, gran actor. Y el papel de los hijos como contrapuntos de un futuro anclado en un pasado. Las dos escenas del río con sendos hijos hubiesen sido un gran punto de partida del guion y no lo que es.

            Por favor, SEMINCI, basta ya de más de lo mismo. Y así llevamos años. Sólo recordarle a la dirección del festival que hay más feminismo en una secuencia de Thelma y Louise (ganadora de la espiga de oro de 1991) que en todos los panfletos pancartistas que nos ha clavado desde que está ahí.

Os dejo un trailer:

fotografía: Luis Gracia Reglero
fotografía: Luis Gracia Reglero
fotografía: Luis Gracia Reglero

Carlos Ibañez

Revista Atticus