65 SEMINCI – Crítica película Siervos de Ivan Ostrochovský

Crítica película Siervos de Ivan Ostrochovský

Ficha

Título original: Sluzobnici

Año: 2020

Duración: 80 min.

País: Eslovaquia

Dirección: Ivan Ostrochovský

Guion: Rebecca Lenkiewicz, Marek Lescák, Ivan Ostrochovský

Música: Cristian Lolea, Miroslav Toth

Fotografía: Juraj Chlpík (B&W)

Reparto: Vlad Ivanov, Martin Sulík, Milan Mikulcík, Zvonko Lakcevic, Samuel Skyva, Vladimír Strnisko, Samuel Polakovic, Vladimír Zboron, Vladimír Obsil, Tomas Turek

Productora: Coproducción Eslovaquia-Rumanía-República Checa-Irlanda; Punkchart films, Point Film, RTVS, Negativ s.r.o, Film and Music Entertainment, Libra Films Productions, Hai-Hui Entertainment, Sentimentalfilm

Género: Drama | Religión. Años 80

Sinopsis

    La Iglesia Católica atraviesa un momento complicado en Checoslovaquia a principios de los años 80. El régimen comunista amenaza con destruir la institución y la somete a un estricto control, por lo que se ve obligada a aceptar ciertas restricciones relacionadas con la libertad de creencias y de expresión. El clérigo está dividido entre la «iglesia de las catacumbas», que mantiene el contacto con el Vaticano y con la prensa occidental, y la «jerarquía eclesiástica», que coopera con las fuerzas del poder y está representada por sacerdotes pertenecientes a la asociación «Pacem in Terris», cuya vida se extendió en el país desde 1971 hasta 1989. Este es el contexto en el que los jóvenes seminaristas Michal y Juraj tienen que decidir si mantenerse fieles a su vocación e idealismo o arrodillarse ante las presiones de la policía secreta.

Crítica

            La presentación de esta película en esta edición de SEMINCI me parecía excelente cuando leí su tema: la lucha por la libertad religiosa en la Checoslovaquia comunista en esa década posterior a que se viesen los tanques del Pacto de Varsovia por Praga. Cuando la potente iglesia católica, especialmente en Eslovaquia, y su afamado seminario de Bratislava se vieron mediatizados por el régimen, que creó un caballo de Troya, como excusa de un grupo de influencia con nombre de encíclica de Juan XXIII, Pacem in Terris (Paz en la Tierra).

            Y lo que me parecía un canto a la libertad, con un guion muy bien llevado, al estilo de La Vida De Los Otros o la también oscarizada y simpatiquísima Kolya, se va convirtiendo en un ejercicio demasiado encopetado y que bajo el subterfugio del cine de autor estropea todo con demasiadas tomas fijas, demasiado blanco y negro no siempre bien tratado y con acciones que comenzaban dos segundos después de iniciar la escena confiriendo una falsedad a un tema tan serio y que costó la vida a demasiadas personas como para quedarse en sandeces de ego puras de petimetre.

            El formato: en 1:85, blanco y negro, con lentes muy bien escogidas desaparece ante tal cantidad de ínfulas de algo que tenía todo el aspecto de que iba a ser una gran película. Con un guion técnico que pasa de radiante a mediocre sin solución de continuidad cuando la historia ya se contaba sola. Y eso la daña hasta pasar de necesaria a superflua, y eso, hablando de libertades es siempre malo.

            Demasiado Lars von Triers desatado en este director, Ivan Ostrochovský. Los excesos de cámara nunca son buenos, del mismo modo que un regate más hace al futbolista fallar de cara a puerta. Lo que podría haber sido una magnífica explicación de por qué Wojtyla fue un papa tan carismático como reaccionario traté de buscarla aquí, pero el abuso de planos me sacó de la historia…

            Lástima.

Carlos Ibañez

Revista Atticus