65 SEMINCI – Crítica Josep de Aurel por Carlos Ibañez

Crítica película animación Josep

Ficha

Título original: Josep

Año: 2020

Duración: 80 min.

País: Francia

Dirección: Aurel

Guion: Jean-Louis Milesi

Música:  Sílvia Pérez Cruz

Fotografía: Animación

Reparto: Animación

Productora: Coproducción Francia-Bélgica-España; Les Films d’Ici, Les Films d’Ici Méditerranée, France 3 Cinéma, Lunanime, Tchack

Género: Animación. Drama | Años 30. Posguerra española

Sinopsis

    Febrero, 1939. Abrumado por la oleada de republicanos que huyen de la dictadura de Franco, el gobierno francés opta por confinar a los españoles en campos de concentración. En uno de aquellos campos, dos hombres, separado por un alambre de púas, traban una amistad. Uno de ellos es Josep Bartoli, un dibujante que lucha contra el régimen de Franco.

Crítica

            Si tuviese que retitular esta valiente cinta hispano franco belga de animación diría: Tramas Pedagógicas. Es una suerte ver que aún hay gente en el mundo del cine que se atreve a remover en temas vergonzantes de su pasado reciente sin tomar partido, sólo mostrando una verdad tan incómoda como la mascarilla.

            Aurel, el director, nos cuenta, con la inestimable ayuda de los trazos que dibujó en un campo de concentración para refugiados (creo que esto me suena a muy actual) de una guerra en la que los franceses no vieron, o mejor, no quisieron ver, que la hidra de siete cabezas del totalitarismo fascista llegaría a toda Europa si devoraba la joven y torpe república española. No es que el totalitarismo que venía de Moscú fuese mejor, pero, de momento, en 1939, pactaba con Hitler no agredirse mutuamente.

            No sigue estrechamente la vida de Bartolí, que pasó por siete campos diferentes y después de escaparse fue capturado por la GESTAPO y enviado a Dachau, aunque nunca vio Baviera porque se escapó antes de llegar al protocampo de concentración. Y aquí, el guionista, se permite la licencia de que quien cuente la historia sea un gendarme bueno. Si Josep viviese aún se sentiría muy decepcionado con este último punto, porque todo suena a la bondad en el epicentro del Pandemonio (recuerdo aquí las palabras de Billy Wilder cuando Barney Balavan le intentó convencer para que cambiase los malos de su película Traidor en el Infierno porque Paramount estaba vendiendo muy bien en la dividida nación occidental después de que los alemanes gaseasen a su madre años atrás en Auschwitz) que eran esos campos donde el tifus y el hambre hicieron el trabajo que las tropas rebeldes no pudieron concluir. Al menos hasta que Francia fue ocupada y se convirtió en un aliado imprescindible en el Mediterráneo, repaso súbitamente con agrado Petain, una película que estrenó SEMINCI cuando era un festival de primer nivel mundial.

            Pero regresando a Josep hay que agradecer a la sección oficial un largo de animación donde todas las tramas, manuales y mecánicas, de trazo y digitalizadas conducen a conocer la idiosincrasia de Bartolí, con la magnífica voz de Sergi López, actor que siempre da un gran nivel a pesar, y éste es un debe de la cinta francesa, de ese sonido horrorosamente aséptico de la grabación. Esto distanciaba, a veces, de la obra bien construida que estábamos disfrutando.

            Maravillosa banda sonora a cargo de Silvia Pérez Cruz y sensacional repaso pedagógico a lo que es una posguerra cuando se vive como refugiado: lo peor de una guerra.

            Quiero agradecer a quien haya seleccionado esta brava apuesta que, al menos para los que hemos leído sobre el tema, era muy necesaria y más cuando se toma a un gran artista español como protagonista de aquella sinrazón, ese hombre que se hizo escenógrafo en Nueva York y muralista en México tras cuatro décadas de exilio, pero era lo que tenía ser intelectual, artista y del POUM en los años treinta, que si volvías a casa te aguardaba un bonito boquete del siete sesenta y dos en el frontal de tu cabeza.

            Disfrútenla como lo que es un documento cargado de realidad y de fantasía en tramas y trazos.

Carlos Ibañez

Revista Atticus