Crítica película No matarás de David Victori

No matarás de David Victori – Una mala noche la puede tener cualquiera

Ficha

Título original: No Matarás

Año: 2020

Duración: 92 min.

País: España

Dirección: David Victori

Guion: Jordi Vallejo, David Victori, Clara Viola

Música: Adrian Foulkes, Federico Jusid

Fotografía: Elías M. Félix

Reparto: Mario Casas, Milena Smit, Joaquín Caserza, Victor Solé, Elisabeth Larena, Fernando Valdivieso, Albert Green, Andreu Kreutzer

Productora: Castelao Pictures, Filmax, Movistar+, Televisión Española (TVE), TV3

Género: Thriller

Sinopsis

Dani, un buen chico que durante los últimos años de su vida se ha dedicado exclusivamente a cuidar de su padre enfermo, decide retomar su vida tras la muerte de éste. Justo cuando ha decidido emprender un largo viaje, conoce a Mila, una chica tan inquietante y sensual como inestable, que convertirá esa noche en una auténtica pesadilla. Las consecuencias de este encuentro llevarán a Dani hasta tal extremo que se planteará cosas que jamás habría podido imaginar.

Comentario

Hay un ejercicio que proponen para llegar a conocer realmente una ciudad. Lo indican para los turistas que acuden a pasar unos días a una ciudad desconocida. Se trata de coger el callejero de la localidad y elegir dos calles al azar (lo más distanciadas posible entre ellas) y desplazarte de una a otra andando. Recorrerás la ciudad sin unos prejuicios establecidos. A veces aciertas, otras no.

Esto es lo que sucede cuando decides ir al cine eligiendo una película dependiendo de su hora de proyección. A veces aciertas y… otras no. Mario Casas fue en el elegido. Es el protagonista de No matarás, la nueve entrega del joven director David Victori (segundo largometraje que acomete tras El pacto, 2018).

En principio se trata de una película que no entra en mi canon. Pero el cine sigue siendo un buen entretenimiento y a un precio asequible. Y además te proporciona un tema para el debate tras su visión frente a un vaso de vino.

La película arranca con Dani (Mario Casas) un joven que cuida, al pie de la cama, de su padre enfermo. Tras el fatal desenlace, Dani decide retomar su vida y llevar a cabo ese sueño tantas veces postergado. Pero alguien se le cruza en su camino, Mila (Milena Smit).

Toda la acción se desarrolla en una sola noche. Así sucedía en la magnífica Jo ¡qué noche! (Martin Scorsese,1985). Es una espiral que, como un vórtice del agua al discurrir por el desagüe del lavabo, una vez que estás metido en él, te ha atrapado sin un posible escape. Desde que Dani toma una pequeña decisión que tiene que ver más con la buena voluntad, con la empatía, se verá envuelvo en una serie de actos que le llevará al caos. El resultado será imprevisible y desastroso que comprometerá el futuro en la vida de alguien que no pasa de ser un buen tipo, eso sí, algo panoli.

El detonante viene de la mano de una mujer/pesadilla. Una mujer que en un principio llama la atención por su vestuario, por su tristeza y por desbordar juventud. Pero resulta ser una mujer camaleónica que se vuelve estúpida, bella, sensual y tóxica. Rezuma inestabilidad por cada uno de sus poros y esto no lo ve el panoli.

El ritmo es frenético. Por medio de cámara al hombro, movimiento constante de la cámara, casi ausencia de planos fijos y largas secuencias, el director nos mete sabiamente dentro de la película. Una de las mejores cosas que se pueden decir de ella, de la película No matarás, es que estabas deseando que acabara por la angustia que te estaba generando y eso es un logro del director (me imagino que también del montador y del sonido). Hay una secuencia (la huida por la caja de escaleras, que es magistral por la tensión que te crea). A esto hay que unir la banda sonora (con un volumen exagerado) que enerva nuestra sensibilidad.

La fotografía juega un papel muy importante. Esos tonos chillones y fríos te enervan un poco el ánimo. Esa atmósfera contribuye a crear la tensión que ayuda en la línea argumental de recrear esa autentica pesadilla que vive su protagonista en esa fatídica noche.

Mario Casas demuestra que es un buen actor dando vida a un Dani panoli. En anteriores interpretaciones la mayoría de buena factura pero tenía un pego terrible: su mala dicción. Constituye uno de sus mejores papeles. Sigue agrandando su carrera con interpretaciones de lo más variado. En esta ocasión se le entiende cuando habla y esa última mirada a cámara es reveladora de que estamos ante un buen actor.  A su lado, Milena Smith, una actriz desconocida se lo come (casi de manera literal). Le roba planos en la misma medida que le arrastra por la vida en su papel.

Si dejamos a un lado giros de guion de difícil comprensión (por mucho que suspendamos la incredulidad) la película, trepidante, resulta entretenida, diabólicamente adictiva, que te sumerge en la acción y no te da respiro. El resultado es que vives una situación en la que te sientes incómodo por ese discurrir del lado oscuro humano. Al final la pregunta que nos hacíamos en la tertulia es el grado de verosimilitud que tiene y si realmente en la vida existe un panoli como Dani. A veces en la vida hay situaciones, que por acción u omisión, te sumergen en algo que no tenías pensado. Una mala decisión encadena a otra y al final no encuentras la puerta de salida.

Si quieren tener su opinión sobre No matarás de David Victori, lo mejor es que vayan al cine. Sigue siendo un entretenimiento barato y ahora… más que nunca seguro. A veces aciertas y… otras no, pero eso es la gracia de descubrir el sabor de los distintos bombones que tiene la caja. Hasta que no lo pruebas no lo sabes.

Os dejo un tráiler:

Luisjo Cuadrado

Revista Atticus