Cabalgata de los Reyes Magos, Valladolid

Cabalgata de los Reyes Magos, Valladolid

La noche mágica

Cuando han terminado las fiestas de Navidad, nos queda para el recuerdo una noche mágica, donde miles de personas disfrutan de la Cabalgata de Reyes. Pero es más que una sola noche, el trabajo empieza mucho antes, los responsables rematan los detalles con compañías nacionales e internacionales, preparar trajes, programación del personal que tiene que hacerse cargo de los niños que participan. Y cuando llega el día 5, comienza el trabajo para todos sus ayudantes mucho antes de la hora de inicio del desfile, las 18.30. Desde primera hora de la mañana, el personal prepara las calles, algunos grupos se reúnen en Filipinos y empiezan los talleres de expresión corporal y coreografías a realizar, los artistas y personal que acompañan esa tarde a sus Majestades de Oriente se visten con sus mejores galas. Ocho carrozas, catorce pasacalles, grupos de animación y de muñecos y dos trenes infantiles acompañan a los Reyes Magos durante el desfile en Valladolid. En total, son 800 las personas que acompañarán a Melchor, Gaspar y Baltasar en su cabalgata, con nervios y mucha emoción. El Ayuntamiento de Valladolid da una oportunidad única a los ciudadanos que participan, vivir la magia desde dentro. Los padres Agustinos Filipinos, colaboran cediendo las instalaciones del convento para que los participantes de la Cabalgata puedan preparar sus trajes y organizar desde allí la salida.

Destaca la incorporación, por primer año, de la Banda Municipal de Música “Mariano de las Heras” del Ayuntamiento de Valladolid. La melodía que acompañará a Sus Majestades de Oriente durante todo el recorrido es otra de las novedades. La música ha sido creada en exclusiva para la ocasión por el músico vallisoletano Juan Laforga.

El grupo alemán “Dundu” y la compañía francesa “Les Piafs” han puesto el toque internacional a la cita. Los germanos presentan en la cabalgada una marioneta gigante iluminada de 5 metros de altura, que desfiló acompañada por los zancudos de la formación vallisoletana Kull d’Sac, también con vestimenta iluminada, en una de sus carrozas nuestro conocido actor y director de teatro Félix Fradejas (espectacular).  En cuanto a la compañía gala, participó con marionetas de pájaros a ritmo de batucada, que fueron manejadas por veinte niños de teatro de un colegio de Valladolid, para lo que los propios artistas impartieron un taller.

Junto a ellos, recorrieron el centro de la ciudad seis miembros de la compañía local La Luz de las Delicias con un espectáculo circense basado en leyendas tradicionales. Asimismo, el público pudo disfrutar de cuatro grupos de muñecos hinchables con iluminación, ocho caballos, seis mariposas, seis domadores y seis soldaditos de plomo, el grupo de patinadores de la Asociación Deportiva Valladolid Patina y un grupo de niños disfrazados por la Coordinadora de Peñas de Valladolid, todo ello muy colorido y alegre.

El recorrido ha sido el mismo que en los años anteriores, con salida desde Paseo de Filipinos y trayecto por Colón, Recoletos, plaza de Zorrilla, Miguel Iscar, Plaza de España, Duque de la Victoria y Ferrari. Una vez en la Plaza Mayor, cada uno de los Reyes Magos descendió de su carroza y realizó la ofrenda en el Portal de Belén. Posteriormente, subieron al balcón del Ayuntamiento para despedirse de los niños y niñas. Una cabalgata espectacular por las calles más céntricas de la ciudad, que todos los asistentes han vivido como una noche llena de luz, color y magia.

¿Hay algo más bonito que ver los ojos de los niños llenos de ilusión? ¿Algo más enternecedor que la inocencia? Al ver así de felices a los niños nos entran ganas de poder detener el tiempo porque sabemos que un día, más temprano que tarde, esa ilusión que ilumina sus caras se romperá en mil pedazos porque, o lo descubren, o algún otro niño les dirá quiénes son los Reyes Magos.

Una Cabalgata vivida con ilusión, que reside en la capacidad de poner pasión en aquello que hacemos y hacérselo sentir a los que nos rodean. La ilusión es un valor que se enseña, se transmite, se hereda, algo bueno, algo que nos ayuda a construir la vida que vivimos. La ilusión es mucho más que imaginar que es real una historia mágica, es una manera de vivir, pero una manera realista de vivir. La ilusión no es confiar en que algo mágico te hará la vida feliz, la ilusión consiste en ser, actuar como un rey mago.

La ilusión es la manera en la que la vida nos sorprende, alguien que te sonríe, momentos, instantes de pura vida, en la Cabalgata los Reyes Magos no son más que una oportunidad para hacer sentir y sentirse bien, así que, qué más da que sean magos de oriente, o no, lo importante es tomarlo con ilusión.

Los preparativos de un día así recuerdan a una superproducción, tras  ensayar alguno de los pasos, vestirse y pasar por maquillaje… “Es un espectáculo de gran formato, hay cosas que lucen más por televisión y otras, en persona”, sin duda nos quedamos con lo vivido en Valladolid.

 

Luis Valares

fotografías: Chuchi Guerra

Revista Atticus