Crítica película La librería de Isabel Coixet 62 SEMINCI

Crítica La librería de Isabel Coixet

Inauguración de la 62 SEMINCI

Isabel Coixer ha dirigido The Bookshop adaptación de la novela homónima de la ganadora del Premio Booker en 1979 Penélope Fitzgerald, y editada en España por Impedimenta con el título de La Librería.

La Librería, con financiación internacional, ha sido presentada en La Semana Internacional de cine de Valladolid. La adaptación de la novela al cine ha sido obra de la misma Isabel Coixet, dotándola de un sello personal.

Cuenta la historia de una mujer, cuyo pasado feliz está ligado a los libros, decide abrir una librería en un pequeño pueblo costero de la Inglaterra de 1959.  Sin saberlo, ni comprender el por qué va encontrándose una cruel e implacable oposición local dirigida por la caprichosa señora rica del pueblo a la que se enfrenta. Poco a poco el pueblo entero va acorralándola y sólo cuenta con dos personas en su defensa, un solitario caballero y ávido lector y una niña de diez años con extraordinaria madurez.

Es un relato sobre el coraje de una mujer normal, Florence, que tiene un sueño… es la luz en lucha contra la oscuridad, una batalla por el poder a veces sin un motivo salvo el de lograr en un caso un sueño y en el otro un capricho por obcecación. Es una historia de vencedores y vencidos, en la que las víctimas al final vencen.

Isabel Coixet es una directora que dirige dramas, y lo hace porque es la vida, la lucha de personajes que quieren vivir. Es una directora que está aprendiendo a no dirigir. Da libertad a sus actores, aprovechando sus mejores facetas para recrear los personajes.

El reparto de actores es estupendo. Los protagonistas son Emily Mortimer, Patricia Clarkson, Bill Nighy, Honor Kneafsey, James Lance. Algunos ya conocían a Isabel de películas anteriores. Otros, simplemente no pudieron decirle que no, como por ejemplo Bill Nighy, uno de los mejores trabajos actorales. Además sorprende su presencia en persona, tan carismático, culto y sereno como en la pantalla, pero con gran sentido del humor.

El ambiente de la película está recreado al milímetro cuidando los detalles de una manera preciosista. Refleja también la contención social en el contexto de la Inglaterra de los años cincuenta, un tanto asfixiante. En cuanto a la frialdad que refleja la novela, en la película es un poco más sentimental, más cálida, más cercana a la sensibilidad.

Puede haber un paralelismo en La Librería con el mundo de la cultura. Unos la defienden y se sienten acorralados… Es, por desgracia, una dicotomía antigua que parece no terminar nunca.

Es una película plagada de referencias literarias. Es por aquella época cuando aparece un esplendoroso Ray Bradbury con sus novelas Fahrenheit 451 y Crónicas marcianas o El vino del estío. Bradbury fue un escritor de muchos le encasillaron como de ciencia ficción pero que él mismo las proclamaba obras de fantasía. Y para otros como un narrador de cuentos con propósitos morales. Y también asistimos a uno de los momentos cumbres en la literatura contemporánea como es el nacimiento de una de las obras más controvertidas y señeras: Lolita (1955) de Vladímir Nabokov, que supuso una lucha entre la libertad y el puritanismo.

Los enemigos de la libertad son muchos. Aquí en La librería, una inocente propuesta de Floreen Green convierte a todo el pueblo casi anónimo en Fuenteovejuna. Lo que al principio parece una propuesta deseable se convierte en un apestado antro. Esta circunstancia la pone en la órbita de Dogville (2003) de Lars von Trier. Tiene el denominador común que la protagonista se tiene que ganar la confianza de cada vecino.

El pase, en inglés, ha suscitado una fervorosa ovación del público asistente en esta cita matinal con la que ha dado comienzo esta 62 edición de la SEMINCI.

Os dejamos un tráiler:

Pilar Cañibano – Luisjo Cuadrado

fotografías: Chuchi Guerra