Crítica película Rocketman de Dexter Fletcher

Sir Elton John vuela tocando el piano

null

Título original: Rocketman

Año: 2019

Duración: 121 minutos

País: Reino Unido

Dirección: Dexter Fletcher

Guion: Lee Hall

Música: Elton John, Matthew Margeson

Fotografía: George Richmond

Reparto: Taron Egerton, Jamie Bell, Richard Madden, Bryce Dallas Howard,Steven Mackintosh, Gemma Jones, Tom Bennett, Kit Connor, Stephen Graham,Matthew Illesley, Ophelia Lovibond, Charlotte Sharland, Layton Williams,Bern Collaco, Ziad Abaza, Jamie Bacon, Kamil Lemieszewski, Israel Ruiz y Graham Fletcher-Cook

Productora: Marv Films / Rocket Pictures / Marv Studios / New Republic Pictures / Pixoloid Studios. Distribuida por Paramount Pictures

Género: Musical / Drama / Biográfico

Sinopsis

Rocketman es una fantasía musical épica que narra la increíble historia personal de los años que hicieron famoso a Elton John. La película sigue la fantástica metamorfosis que transformó al tímido prodigio del piano Reginald Dwight en la superestrella internacional Elton John. Esta película -ambientada con las canciones más apreciadas de Elton John, interpretadas por la estrella Taron Egerton- será una fuente de inspiración para muchos, que conectarán con la universal historia de cómo un joven de un pueblo pequeño se convierte en una de las figuras más icónicas de la cultura pop. Rocketman también está protagonizada por Jamie Bell en el papel del letrista habitual de Elton y compañero de composición Bernie Taupin, Richard Madden en el papel de primer manager de Elton, John Reid, y Bryce Dallas Howard en el papel de madre de Elton, Sheila Farebrother.

Taron Egerton as Elton John in Rocketman from Paramount Pictures.


Comentario

«Esta historia abarca mi vida desde antes de 1960, cuando era un niño, hasta 1990, cuando entré en la clínica de rehabilitación. Narra la época en la que empecé a hacerme famoso. Fue un periodo extraordinario y surrealista, y así es como quiero que sea la película. Divertida, pero abordando cuestiones serias. Teníamos que encontrar el equilibrio adecuado. Para mí era realmente importante que la película fuese un musical, porque la música es mi vida».

 Elton John

Tanto la crítica como el público lo hacen. Así que es inevitable y difícil no caer en la tentación de comparar estas dos películas que se han estrenado con unos pocos meses de diferencia y que en algunos cines coinciden en cartelera. Me refiero a Bohemian Rhapsody (Bryan Singer, 2018)) y Rocketman. Incluso y aunque no fuera un biopic se podía meter en este mismo cajón a Ha nacido una estrella (Bradley Cooper, 2018).

Otra cosa bien diferente es que los gustos coincidan. Ya les adelanto que el que suscribe estas líneas salió emocionado de la primera de ellas (sin entrar en más valoraciones, así de sopetón, en base a los instintitos primarios).

Como bien saben a estas alturas, Bohemian Rhapsody se centraba en el cabecilla de una de las bandas más importantes de la historia del rock, Freddie Mercury. En este caso, Rocketman tienen como protagonista a Elton John, uno de los músicos más significativos y trascendentes. Estamos ante dos genios, y, por lo tanto, es inevitable esa comparación, algo así como aquello de… ¿y tú de quién eres más, de los Rolling o de los Beatles?

Dicho lo cual, Rocketman tiene como protagonista a un excelso Taron Egerton dando vida al mítico y aristocrático músico. La película se centra en cómo nace el mito, en la relación que tiene con su compañero inseparable, Bernie Taupin, una sociedad de creación muisical irrepetible, y en sus devaneos con el mundo de la droga.

Taron Egerton plays Elton John, Richard Madden plays John Reid and Bryce Dallas Howard plays Sheila in Rocketman from Paramount Pictures.

Llegado a este punto es inevitable echar un vistazo a la actuación de los dos protagonistas de ambas películas. Todavía hay a quienes le está escociendo el Oscar al mejor Actor de Rami Malek. ¿Qué mejor galardón que darle ese premio a alguien que no sabe cantar y que se ha tenido que meter en la piel de un todopoderoso Freddie Mercuy? Egerton encarna a Elton John y no solamente actúa (y de forma soberbia) sino que canta cada uno de los temas. Ahora no es raro verle haciendo de compañero al piano del propio artista, no sé si con el fin de publicitar la película o como parte del espectáculo (ha nacido una estrella). Su compañero de reparto, dando vida a su inseparable Bernie Taupin, es Jamie Bell (aquel encantador Billy Elliot). Forman un dúo interpretativo sólido como esa relación que tuvieron. Es muy interesante ver la forma de trabajo que desarrollaron.

«Mi vida ha sido una auténtica locura. Los momentos bajos han sido muy bajos, y los altos muy altos. Por desgracia, no puede decirse que entre ellos hubiese muchos periodos equilibrados…».

Elton John

La película arranca con un histriónico Elton John, disfrazado d Satanás, ataviado con unas exóticas alas, un gorro con cuernos y unas extravagantes gafas en forma de corazón, acudiendo a una sesión de terapia. Una estética que fue una constante y una definición -aparte de la incuestionable calidad de sus composiciones- en su carrera (y aún hoy sigue siéndolo).

Taron Egerton plays Elton John in Rocketman from Paramount Pictures.

Narrada mediante flashbacks, salta de un momento a otro en la vida del músico, siendo el nexo de unión esa cita con la terapia. Allí va soltando capas y capas hasta llegar a Reginald Dwight, un niño londinense, que sufrió el desdén y abandono de un padre que no le quería y una madre que no le atendía, y que, al final, lo único que le preocupaba era su propio bienestar. Gracias a la abuela, el pequeño pudo encontrar cierto cariño y explotar ese don natural como era poder reproducir las notas en un piano con tan solo haberlo oído una vez.

Quienes conocen la vida de Elton John, aseguran que la ficción es bastante fiel a la realidad. Así debe de ser pues el productor es el propio cantante y se ha cuidado de este asunto (ver la cita con la que abro esta crítica). Un tiempo muy medido con un metraje ajustado en lo que nada sobra. Brillante la dirección de Dexter Fletcher, quién ya había demostrado su hacer en Bohemian Rhapsody tras el despido de Byan Singer.

“Hay ciertas cosas que han ocurrido en mi vida que cuando las veo con perspectiva pienso que deben haber sido una intervención divina” dice John, con una sonrisa. “La primera cosa fue que decidiese dejar la banda con la que estaba (Bluesology) y quisiese hacer algo diferente. Yo era un regordete que no tenía mucha confianza en mí mismo, pero estaba tan harto de hacer cabaret, de tocar para gente a la que la música no le interesaba nada… … que respondí al anuncio del New Musical Express. Cuando lo pienso ahora me pregunto de dónde sacaría el valor para hacerlo. Pienso, “con lo tímido que era entonces… ¿cómo demonios hice aquello?’“

Salí del cine con la sensación de que Rocketman es una buena película. Pero no salí de la misma manera que tras ver a Bohemian Rhapsody. En esta última, el desarrollo de la película tenía un fin: asistir al mítico concierto de Wembley. Fue el premio mayor para aquellos que no pudimos asistir. Fue el éxtasis, fue la apoteosis final. Era como si hubiera estado allí mismo, en aquel concierto, con entrada VIP. Es decir, era una recreación, mientras que Rocketman nos cuenta una historia en un tono más de musical, una ficción, donde las letras forman parte del guion. Con unos actores entregados a la causa. Participa más del estilo que hemos visto recientemente en La la land (Damien Chazelle, 2016) que en la mencionada Bohemian, donde las canciones están al servicio del guion, con escenas que dan sentido a la historia y permite que los personajes sufran esa evolución que en toda buena trama deben experimentar. Su final es un tanto precipitado y nos suministra una serie de datos (muy interesantes no solo sobre la vida privada de Sir Elton John, sino sobre su fundación, su altruismo y la lucha contra el SIDA) que nos cuesta asimilar.

Taron Egerton plays Elton John in Rocketman from Paramount Pictures.

En definitiva, una historia de un hombre, de un genio, como una historia de superación. Una película muy entretenida, ideal para los amantes de la música, del rock, de las biografías y de todos aquellos a los que nos gusta meternos en una sala a oscuras por espacio de dos horas y desconectar del mundo.

«Tienes que matar a la persona como la que naciste para poder convertirte en la persona que quieres ser».

Os dejo un enlace con la mítica canción Saturday Night’s Alright for Fighting y un tráiler.

Luisjo Cuadrado

Revista Atticus