ALEGRÍA
Tradicionalmente la Navidad se asocia al jolgorio y a la alegría.
También son días en los que nuestro recuerdo va para aquellas personas que ya no están entre nosotros. Queremos disfrutar con los presentes pero también no olvidar a los ausentes.
Desde esta modesta publicación quiero expresar, en nombre de todos los que hacemos posible Revista Atticus, el sincero deseo de que paséis una ¡Feliz Navidad! y un ¡Feliz 2010! Que la alegría presida la mayoría de nuestros actos durante el próximo año.
Acudo a los versos de una de las personas que ya no están entre nosotros: Mario Benedetti y que expresó de forma magistral nuestro sentimiento para 2010
DEFENSA DE LA ALEGRÍA
Defender la alegría como una trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias
y las definitivas
defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias
y los graves diagnósticos
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
de las endemias y las academias
defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres
defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y de la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas
del azar
y también de la alegría.
Texto: Mario Benedetti
Foto: Escena belén napolitano, Museo Nacional Colegio de San Gregorio, Valladolid
El número 9 de Revista Atticus está por aquí abajo.
Luisjo